Como diseñar un jardín urbano
Las zonas pavimentadas deben tener una leve pendiente hacia los sumideros. Con el fin de suavizar los muros se han alzado las zonas de plantación. Se utilizan los mismos ladrillos para el pavimento, los bancales en meseta y las paredes para unificar el conjunto. El fondo de los bancales se rellena con los cascotes de la obra con lo que se facilita un buen drenaje a las zonas de plantas y se evita el traslado de escombros. Deje orificios para el drenaje en la parte inferior.
Una fuente de agua como centro del jardín
Situada en una esquina del bancal, va alojada en un bidón de polietileno, cuidadosamente situado para que su borde quede a 4cm del nivel del suelo definitivo. Hay que construir dos pilares de ladrillo de 230 x 230mm en el interior del bidón, con una obra de ingeniería «dura» que no sufra los efectos de una prolongada inmersión en agua.
Los pilares se interrumpen poco antes del borde del bidón para que la pizarra que forma la pila propiamente dicha quede separada del borde y del suelo de alrededor. También puede emplear, en lugar de pizarra, granito o mármol. Los materiales sobrantes de granito, pizarro o mármol, encontrarán una buena aplicación en el jardín como elementos ornamentales, que benefician el paisajismo.
La pizarra se perfora en el centro para dar paso a una cañería de cobre de 12mm. La cañería se introduce por el agujero de modo que quede a ras de la superficie superior, pero proyectada unos 5cm por la parte inferior con el fin de empalmarla con la manguera de la bomba sumergible. Esta última se instala en el fondo del bidón y se conecta a la vivienda con un juego adecuado de enchufes y cables externos.
En el momento de pavimentar el suelo se puede empotrar un cable blindado bajo las losas, con lo que se evitará que corra por encima del suelo. En caso de tener alguna duda referente a la instalación eléctrica conviene pedir consejo a un profesional, de manera especial en el jardín, donde son evidentes los riesgos de humedad y accidentes.
Debe retrasar la instalación definitiva de la pizarra, los guijarros y las piedras grandes hasta que el bancal próximo esté lleno de tierra y los demás elementos del jardín queden terminados, con el fin de retirar fácilmente los cascotes y residuos del bidón. Es inevitable que algunos fragmentos vayan a parar a él, por eso es importante seguir esta recomendación.
Un armario con encimera para las plantas del jardín urbano
El siguiente elemento a construir es el armario con encimera, con la doble función de servir de superficie de trabajo y de soporte para las plantas. La estructura principal se hace con paredes de ladrillo de 115mm, cada una de las cuales divide el armario en secciones y hace de soporte para los dinteles. Estos últimos son del tipo «prefabricado», que se venden en diversos anchos y largos. La gran ventaja de este tipo da dintel reside en su grosor: cerca de 5 cm. Son necesarios tres dinteles de 23cm de ancho (firmemente encajados uno al lado de otro en el mortero) en la parte superior de las paredes. A continuación se instalan las losas de pavimento vidriadas de 25mm de grosor para formar la encimera del armario, dejando que la primera hilada sobresalga 25mm por la parte frontal. De este modo servirá de vierteaguas para que no se mojen las puertas.
Las puertas se construyen con listones cepillados con lengüetas y ranuras y luego se pintan con una primera mano de imprimación y otra de blanco. Bisagras, picaportes y tornillos de obra deben ser de latón, para impedir que se oxiden con la humedad ambiente.
Decoración del pasillo del jardín de la casa
Seguidamente se instalan las vigas blancas que corren por el pasillo o la parte más estrecha de la terraza o patio. Se construyen con listones de 230 x 50mm y se sujetan con soportes para vigas; unas pértigas de andamio sirven para cubrir la parte superior de la pared.
Para facilitar la ascensión de las plantas trepadoras por las vigas atornille unos ganchos redondos y metálicos en la cara inferior de aquéllas para hacer pasar alambres por los agujeros. Cuando una planta ha alcanzado la altura deseada es muy sencillo encajar los tallos bajo el alambre para formar una atractiva cúpula vegetal que oculte el entorno.
Plantas para un jardín urbano
La última fase importante se refiere a la plantación y la preparación de los bancales propiamente dichos. Elija la tierra de cada lugar, dependiendo de lo que piense plantar en él.
En patios y terrazas de casas urbanas la sombra suele ser un factor limitante. En esta selección se incluyen numerosas plantas amantes de la sombra, algunas de las cuales se describen a continuación. Fatsia japonica (aralia del Japón) es una buena elección junto con Hosta sieboldiana, que contrasta con la forma erecta de Iris foetidissima Lutea. Las especies de Hydrangea son insuperables. Viburnum davidii, que forma un arbusto redondeado y compacto, es otra perennifolia con atractivas bayas color púrpura. Para resaltar las líneas verticales se incluye Rhus typhina Laciniata.
También las trepadoras tienen gran importancia. Jasminum nudiflorum. (Jazmín de invierno) o la trepadora Hydrangea petiolaris son muy útiles en una pared sombría al igual que la enredadera de Virginia, de la que Parthenicissus tricuspidata Veitchii es una excelente variedad. Aristolochia durior o macrophylla (la pipa de Dutchman), que debe su nombre vulgar a la extraña forma de sus flores, se encontrará a sus anchas a pleno sol o en semisombra. Actinidia es ideal para lugares soleados, al tiempo que Lonicera (madreselva).
Como las plantas están poco desarrolladas cuando se introducen en un lugar nuevo, es una idea acertada rellenar los huecos iniciales con especies anuales voluminosas y, desde luego, con bulbos. Nicotiana (la planta del tabaco) y Matthiola ponen la nota aromática, en tanto que Helianthus (girasol) tiene cualidades más llamativas en esta fase inicial.
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